Miradas

Me miró, melancólico...
Me tendió su mano y una lágrima cayó por su mejilla y tocó mi alma. Se escuchó el caer de su orgullo, cuando rebotaba contra el piso y él mismo se asustó.
Me miró, asustado...
Era un niño esperando el sí para salir a jugar. Y al lado de su orgullo quedó nivelado el mío, ocultando con su peso todo el odio que creí sentir.
Lo miré, asombrada...
Sentí que era de nuevo la misma niña que se enamoró de él aquel diciembre de calor.
Lo miré, algo triste...
No sabía si creer o no ¿sería en su camino otro juego más?
Me miró, con esa férrea convicción de siempre
Lo miré, sonrojada y algo alegre...
Nos miramos, caminamos de la mano, levantando de una
vez por todas, esta historia arruinada por amoríos baratos.
Comentarios
Amorios baratos...me encantó.
besos!
sabes transmitir sentimientos...
me sentii ahi..en tu lugar y en su lugar...
todo puede pasar
Luis: Gracias por el halago, en los momentos de soledad leer que uno hace algo bien es lo más lindo.
Todo puede pasar, lástima q sea en sueños